El Edificio del Museo Marítimo del Cantábrico de Santander se encuentra en la Calle San Martín de Bajamar s/n, al borde de la Bahía y cerca de la Playa de los Peligros.
Al final de la dársena de
Puertochico y entre la Caseta de los Prácticos del Puerto y la Escuela Técnica Superior de Náutica comienza la Calle Gamazo.
Siguiendo el paseo, que pasa por delante del Palacio de Festivales de Santander y el Dique de Gamazo, llegamos al
Museo Marítimo del Cantábrico.
El museo fue inagurado en 1981, con modificaciones posteriores y está dedicado esencialmente a la biología marina y la relación y actividades del hombre con el mar.
El museo cuenta con una superficie de más de tres mil metros cuadrados de exposición.
Dispone de numerosos objetos de exposición y de grandes acuarios donde se puede observar la vida marina.
Es el museo más visitado de Cantabria.
Caminando por el paseo, venimos del oeste, llegamos a la bifurcación que vemos en el mapa de Google y tomamos el paseo al borde del mar.
El museo es el edificio que tiene la mitad de la cubierta blanca con dos edificios próximos, uno a cada lado.
Ver mapa más grandeVamos a rodear los tres edificios.
Antes de llegar al museo pasamos por delante del Centro de Formación Náutico Pesquero.
Es una zona donde se colocan muchos pescadores a caña, de ahí la fila de coches.
Además también es un lugar de paseo.
El Museo Marítimo del Cantábrico se encuentra por debajo de la Avenida de la Reina Victoria, cuyos edificios, con buenas vistas a la bahía, vemos en lo alto.
Frente al edificio vemos en la bahía pequeños botes con gente pescando y al fondo entre la neblina
Peñacabarga.
Por este lado no es la entrada al museo, hay que dar la vuelta.
Aprovechamos para ver en lo alto el Hotel Real en el Paseo de Pérez Galdós, más arriba de la Avenida de la Reina Victoria donde están los otros edificios.
Podemos dar la vuelta al pasar el edificio del Instituto Español de Oceanografía, pero seguimos ya que cien metros más adelante se encuentra la Playa de los Peligros a la que le sigue la Playa de la Magdalena y después la Playa de Bikinis.
Vemos desde aquí la Península de la Magdalena con el Paraninfo y entre los árboles una torre del Palacio.
Día espléndido de invierno pero poca gente en la playa.
Volvemos.
Por estas escaleras se accede a la entrada al Museo Marítimo del Cantábrico.
Además de varias plantas y un patio interior cubierto, dedicados a exposición, en la última planta hay una cafetería restaurante con salida a una terraza desde la que se tiene unas excepcionales vistas de la Bahía de Santander.
